La
blogosfera cubana se vuelve inhóspita. No es la primera vez que escribo sobre
un fenómeno que lleva a nuestras bitácoras a caer en sectarismos poco
beneficiosos, o enfoques analíticos lejos del análisis. De una gran concertación
que promulgaba el respeto al derecho ajeno, pasamos al coqueteo con una agenda
única y de allí al desmiembro. No se supo coordinar la gran diversidad que
tenemos, ni se encausó la riqueza humana que supone tanta gente de talento. Por
el contrario, rápida y parcial,
Blogosfera Cuba se metamorfoseó en un directorio de blogs, cuya fría apariencia
denota la frialdad del proyecto hoy por hoy.
Lamento
que desde la concertación que tuvimos, algunos de nosotros hallamos puesto
demasiada confianza en unos pocos. Creí que al fin, a través de los blogs, la
prensa nacional tendría ese oxígeno que necesita. La ilusión de ganarnos un
espacio institucional, un reconocimiento, pereció en manos de quienes creyeron
un derecho definir agendas y estructuras. Así se estigmatiza la diferencia y
los hilos de la uniformidad entorpecen un proyecto que contaba con ventajas
para el triunfo. Mas ya las cartas se pusieron en la mesa, y cuando pudimos ser
un foro interno diverso con un rostro diverso y coherente hacia afuera; preferimos
que el chancleteo se adueñase y ahora mismo el proyecto es su propia sombra.
Esta
crítica, resultante de tanta observación, la suelto luego de que pudiese
constatar que en efecto somos un directorio de blogs y no la más amplia red de
corresponsales blogueros a nivel nacional. Ni tira tiros ni mercenarios, esa
era mi idea de lo que no debíamos ser los nuevos periodistas ciudadanos. Más
allá de unificar la agenda en determinados momentos, previo consenso; se hizo
evidente la presencia de fuerzas reguladoras desde afuera, las cuales
intentaron clonar enfoques ya fallidos en el campo de la comunicación
institucional. ¡Ni hablar de quienes por su antigüedad, número de visitas,
pedigrí periodístico, diseño web o influencia grupal; creyeron que merecían un
papel opinativo preponderante! La maña napoleónica nos llevó a quedarnos sin
subalternos, y nuestro Waterloo empezó con aquel desdén hacia iniciados o poco
informados, que también querían bloguear y ser protagonistas de una idea mayor.
Me
mantuve callado en la concertación de Blogosfera Cuba, no suelo batallar en terreno ajeno, sin
conocer tampoco contra qué o quiénes lucho. Pero transcurridos unos meses, en
los cuales participé y tomé distancia alternativamente con respecto al
proyecto; digo que el asunto enfrenta una crisis y sólo una segunda
concertación podrá salvarlo. Vernos las caras y decirnos: “fallamos”. Las
estructuras de mando, de tan laxas, cayeron en el personalismo, y a estas
alturas difícil será lograr incluso otro nivel de convocatoria física de
relevancia. Hay que tomarnos en serio el asunto, lo cual no significa ser
aburridos, sino efectivos.
La
revista, publicación que hasta ahora me es desconocida desde mi conexión
pueblerina y precaria; ha tenido un impacto indudablemente escaso en la sociedad.
Los mecanismos publicitarios fallaron y el hecho no pasó de un acontecimiento
artesanal, con escaso nivel de reconocimiento fuera de marcos estrictamente
endógenos. No basta con un buen diseño, ni con textos llamativos y bien
escritos. Toda revista presupone una personalidad mediática bien definida, y
estrategias comunicativas que la den a conocer, sobre todo en públicos
potenciales.
Agradezco
el espacio que se me brindó desde un inicio en Blogosfera Cuba, así como la
amabilidad de sus miembros sin excepción. No acuso a nadie de errores en los
que yo mismo no haya participado, ni de los cuales no sea cómplice al menos
desde la inactividad. El programa de radio que en mi emisora producimos durante
dos meses, testimonió el entusiasmo de muchos blogueros por un proyecto que
prometía. Mas aquel espacio en el espectro radiofónico nacional salió del aire,
y cuando una misiva a la dirección de mi centro de trabajo pudo resolver mucho;
nuestra manía napoleónica dictó el final del único impacto institucional de la
blogosfera cubana en los medios oficiales.
Como
tengo fe en la bondad de los cubanos, creo en limarnos los defectos y
concertarnos otra vez. No somos los blogueros sólo un grupo enorme, dividido en
subfamilias por afinidades juveniles. Hay un compromiso con la seriedad, toda
vez que se publica o dice algo. La confianza la merecemos todos, así como el
protagonismo. Sería fatal que el estado destructivo de Blogosfera Cuba quedase
tal y como luce, o tal vez peor. Si creímos en el proyecto, si no fue una farsa
o un escenario chancletero alguna vez; hora ya de que lo rescatemos para darle
su brillo y dignidad. De lo contrario, ese frío directorio de bitácoras
terminará derretido.
Hola Mauricio,
ResponderEliminarMe parece que para bien has escrito un post explosivo pero no coincido con algunas de tus opiniones.
Para empezar, debo aclarar que no soy yo de las blogueras más activas de Blogosfera Cuba pero me siento bastante identificada con esta comunidad como para creer que está tan desmembrada como dices, lo cual tampoco quiere decir que sea perfecta o algo parecido.
De hecho, opino que tu análisis parece ir más enfocado a la búsqueda del formalismo contra el cual te pronuncias que a favor de la diversidad de criterios y temas cubanos que yo detecto cada vez que repaso ese "directorio de blogs" al cual afirmas que se ha reducido BgC.
Yo creo que ahí está la mayor ganancia de la comunidad: en que cada cual publica lo que piensa y opina sobre el archipiélago (lo que nos une a todos al fin y al cabo) desde posiciones tan heterogéneas y críticas como revolucionarias y a veces divergentes.
Lo otro, y me refiero con esto a los encuentros offline por ejemplo, forman parte de una prolongación de la condición digital que nos une y que a mi entender no es imprescindible pues, como ya sabes, hay muchos blogueros que nos sentimos parte de BgC sin siquiera conocer de frente a los miembros más antiguos, con los blogs más visitados, de más "pedigrí" periodístico, con mejor diseño web o influencia grupal (algunas características que mencionaste en tu post).
Si por alguna casualidad -como sé que ha pasado- notas que las opiniones de algunos blogueros tienen más peso en la vida online de la comunidad es porque son más participativos (al menos así me parece a mí) y por méritos propios se han ganado el lugar y la visibilidad que tienen sin frenar el desarrollo y crecimiento de otras voces.
Lo mismo pasa con quienes hacen la Revista, que son unos poquitos y se han echado a las espaldas una iniciativa de ingeniosa factura en la que muy pocos de los más de 200 que estamos en BgC se han arriesgado. Lo de la publicidad de la revista es discutible, por lo difícil que debe ser hacerla salir de las fronteras de la web y que llegue hasta los medios de comunicación y espacios de la Cuba física.
Con respecto al ciberchancleteo a que haces referencia y que vivimos alguna vez en el grupo cerrado de la comunidad, solo tengo que decirte algo ¿quién dijo que las cosas iban a ser fáciles entre nosotros? ¿quién dijo que habría consenso en todos los asuntos? ¿a quién se le ocurriría que en un grupo de cientos de cubanos capaces de discutir y defender sus ideas dentro y fuera de la web, con o sin chancletas, todos iban a pensar como el más revolucionario entre revolucionarios quiere que se piense o como el más crítico entre los críticos lo desea?...
En resumen: No hay que vernos las caras para decirnos “fallamos” sino para ver cómo podemos seguir articulando esta otra forma de asumir nuestro país desde un periodismo ciudadano online que algún día, si el acceso a la tecnología nos lo permite, podrá ser consumido y compartido o no por nuestros vecinos y familiares desconectados.
Abrazos,
Yisell (www.lentedaumento.wordpress.com)
Hola Mauricio.. muy bueno esto que pones... te confieso que entre a BgC con una idea y al ver el escenario tan negativo y cibercjancletero que se armó, donde todos gritaban y silenciaban a los otros decidi irme. Gracias por este texto. Saludos desde la ISla
ResponderEliminarSu autenticidad radica en una simple fórmula, no responder a intereses foráneos u oficialistas, sino a necesidades colectivas y objetivos comunes; elementos que han hecho de ¨Blogosfera Cuba¨ una auténtica familia con pluralidad de voces, y que casi sin proponérselo, ha estado respondiendo estos últimos tiempos a las necesidades más humildes del pueblo cubano.
ResponderEliminarhttp://www.chiringadecuba.com/2014/04/14/blogosfera-cuba-un-dolor-necesario-para-todos/#comment-25076
Personalmente, no pertenezco a la Blogosfera Cuba que no es por suerte, la blogosfera cubana. Me di de baja voluntariamente, al igual que unas cuantas personas mas. Y estoy mejor asi porque cogia tanta lucha... Sin embargo me quedan amigxs, por ejemplos los 3 que aca han comentado, por eso entiendo que la blogo ha funcionado como minimo como FB, Tw o cualquier otra red social. Gracias por post Mauro.
ResponderEliminarTodas las opiniones son respetables y veo que nos unen más puntos de contacto que divergencias. Eso pasa cuando se dialoga entre auténticos demócratas. La Blogo se propuso hacer mucho, y fue demasiado laxa. Con el talento y la diversidad que tuve en sus filas, pudo ser la más amplia red de periodistas ciudadanos mejor preparados de América. Pero sostengo mi criterio, a pesar de que no lo considero irrevocable llegado el momento, de que los hilos conscientes del vicio napoleónico, la incultura del diálogo, el ciberchancleteo, la gritería, la incapacidad de consenso; nos llevó a ser un directorio fallido. Por cierto, discrepo de la Chiringa, cuando expresa que la Blogo "casi sin proponérselo" ha servido a los intereses de los más humildes; pues el periodismo siempre deberá tener como premisa y proposición elemental dicho objeto. De lo contrario, hacemos literatura o panfleto propagandístico. Un abrazo sincero a todos, espero y creo en una segunda concertación, esta vez amplia y efectiva.
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